"Y como no sabía que era imposible... Lo hizo"
Los niños estaban ansiosos por la búsqueda de huevos que cada año el alcalde se encarga de organizar, la expectativa los invadía, todos preparados con sus canastas deseosos de disfrutar cada huevo que encontrasen. El alcalde no perdió un segundo, se disfrazo de conejo y se dispuso a esconder los huevos en los lugares mas remotos de la isla. Los niños esperaban a que la búsqueda comenzara, y los adultos disfrutaban de los mejores brebajes donados para la causa, la borrachera invadía a los adultos, y la expectativa a los niños.
A la hora de haber iniciado la búsqueda, todos sus niños habían encontrado por lo menos un huevo hecho con el mejor chocolate de la isla. Pero había un niño, el pequeño Timmy, que no tuvo tanta suerte. Aunque el nunca perdió la esperanza. Se dispuso a seguir buscando durante un largo tiempo, aunque el evento ya había finalizado y el alcalde le comento que no quedaban mas huevos por encontrar.
El niño siguió buscando hasta que por fin logro encontrar un huevo, un huevo tan bien escondido que no era de éste evento de pascua, sino que era del año pasado. El pequeño Timmy, envuelto de alegría volvio triunfante a su cada, y aprendió que aunque aveces algunas cosas se tornen muy difíciles nunca hay que perder la esperanza y seguir intentando hasta el último segundo, que al final el destino sabrá recompensar tal esfuerzo.
Fin